Vino de color amarillo con destellos dorados, de intensos aromas florales, delicadas notas a pétalos de rosa, pomelo, maracuyá y membrillo, junto a sutiles toque de picor a jengibre. En boca es concentrado, de gran frescor, con mucho volumen y potencia, con un final cremoso y persistente.

Se sugiere como compañía de sushi, platos sutilmente condimentados con jengibre, estragón, azafrán o curry, comidas asiáticas en general y postres. Servir a 10º C.